El 29 de Mayo de 1969 se editaba el primer álbum de Crosby Stills & Nash. Se encendía la magia de estos tres talentos, algo que aún hoy perdura y sigue asombrando.
En aquel momento, los tres venían de decepciones con sus respectivos (y famosos) grupos: The Byrds para Crosby, Buffalo Springfield para Stills y The Hollies para Nash. Un nuevo camino se abría, aunque habría por delante nuevas peleas y decepciones, pero cada vez que ellos se reúnen (aunque nunca se hayan separado) aquella magia cobra vida una vez más. Luego vendría Neil Young para agregar una perspectiva distinta a la banda, pero esa es otra historia.
La inusitada y sorprendente potencia vocal de David Crosby, la cristalina afinación de Graham Nash y el inagotable talento de Stephen Stills en la guitarra, hace de cada escucha de esta banda un delicioso Dejá Vú.
Una de las más grandes y fidedignas expresiones de la genaración Woodstock.